El Síndrome de Casandra I: Neorrenacimiento

Ya hace 500 años que en el corazón norte de Italia y toda Europa Occidental renovó la visión del mundo y del ser humano. Hechos importantes como la invención de la imprenta por Gutemberg en 1450 o el descubrimiento de que la Tierra y los demás planetas giran alrededor del Sol por Copérnico en 1543, fueron hechos que modificaron la percepción del hombre. Esto afectó a la vida dándose un interés por las artes, la política y las ciencias, cambiando el punto de vista central de aquella sociedad de Dios, al Hombre.

Hoy, en nuestro presente estamos asistiendo a una visión consciente de aquel hombre que pusimos en el centro del universo. Estamos re-renaciendo de nuevo, lo estamos analizando con lupa y al igual que entonces, hechos presentes como los descubrimientos de la teoría de la relatividad por Einstein en 1915, o de la doble hélice de ADN por Watson y Crick en 1953 o, incluso el uso de información compartida por medio de Internet creada en 1969 (Arpanet) están cambiando nuestra forma de ver el mundo aquí y ahora.

El punto de vista central de nuestra sociedad esta cambiando del Hombre, a la Tierra y de la Tierra al Universo. No somos conscientes de ello porque esta en nuestros días. Como entonces, las ideas que modifican la visión dominante, generan dificultades en los individuos para aceptar otra visión del mundo que la establecida. Las cabezas dormidas de una masa socializada en una normalidad patológica plagada de normalópatas, no hace más que divertir a las neuronas que están de vacaciones para que sigan allí, y no se alimenten de reflexiones sobre la existencia del hombre.

Si en aquellos días se acuñaba el término humanismo para definir "el amor a la humanidad" hoy el término y el sentimiento serían el mismo, a diferencia que los humanistas de hoy, además de los recursos de aquellos días, utilizan sobre todo, los recursos de nuevas tecnologías dependientes de la electricidad para crear, aunque utilizando lo mismo. La imaginación.

Hoy los humanistas del s XXI ya no escriben en papel. Sus obras las escucharas algún día en el telediario antes de acabar como noticia friki, hasta que años después te acuerdes de hasta donde llegó aquella idea. Hoy, como entonces, podemos crear obras de Pintura, Música, Lírica, Versos, Filosofía...pero ahora digitalizadas y compartidas en trozos de pantalla que se reproducen en otras pantallas mas pequeñas y resuenan en nuestras cabezas y en cualquier parte. Lo compartimos en el parque, el el bar, en la calle, en el metro, en el bus, en el tranvía, en el ascensor, en la piscina, en el mar, en la tierra y en el aire.

Quizás dentro de poco nos compartiremos a nosotros mismos dentro de una pantalla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario