Un cruce de caminos en mitad del pasillo, muestra la cara oscura del olvido:
La mezcla de pasión y fuerza, me hace buscar la firmeza;
Las letras en papel muestran mis lágrimas de dolor y tristeza (me siento bien
pero nadie lo aprecia);
Los silencios, son largos ratos de temor, porque buscando lugares de temor, no
encuentro sin más, pasión.
Incomprendido me siento cuando alzo la vista al viento.
Larga soledad la que me busca y me encuentra.
No son más que palabras sin sentido, las que me hacen ver
en que me he convertido: una sonrisa frente a un cruce de caminos.
Pasado, futuro y presente evocan en mi mente pensamientos al azar,
porque el sentido de un momento no lo puedes cambiar
y sin más, te encuentras con una barrera de frente.
Tus muros no tires porque yo ya lo he vivido, ahora llegas
cuando yo ya me he ido.
La felicidad que me produce el saber de lo vivido,
no es más que un amigo, que sonríe y me muestra el destino.
Si lo quieres creer no es mas de lo que te digo.
Sueño tengo cuando pienso en el enredo que producen
largas noches de soledad.
Buscando en el paquete, me enciendo otro cigarrillo.
Quemo mis ultimas penas con el sudor de mi frente,
que entre largas noches de palabras, olvido,
que me siento bien conmigo.
Aun así, sigo recordando que el placer de lo vivido,
no puede ser compartido con la misma intensidad
que con la que digo,
por que los momentos que nombro, sólo pueden ser predichos por un testigo...
... mi mente
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